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Tecnología electrónica y óptica de última generación, totalmente adaptable a luminarias antiguas. |
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Mayor eficiencia energética, la mayor parte de la energía consumida es convertida en luz. |
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Baja temperatura de funcionamiento. |
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No atraen insectos. |
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Mayor vida útil: hasta 60.000 horas, versus 6.000 horas de las lámparas convencionales. |
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Muy bajo mantenimiento. |
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Mantienen el rendimiento luminoso ante variaciones de tensión ó frecuencia en la red eléctrica, gracias al control electrónico de corriente. |
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No parpadean. |
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No emiten rayos UV, dañinos para la vista. |
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No son afectadas por los ciclos de encendido / apagado. |
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Encendido y plena luminosidad instantánea (no requiere de tiempo de arranque). |
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No requieren de generadores de RF, ni producen interferencias electromagnéticas. |
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No requieren cables especiales ni instalaciones complicadas. |
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Posibilidad de regulación de la intensidad luminosa (dimming). |
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Altamente resistentes a impactos, vibraciones y cargas mecánicas. |
